Pues yo soy ciclista en la Ciudad de México. Diario uso la bicicleta y tengo que maniobrar entre autos, baches, ciclistas en sentido contrario, carritos de negocios ambulantes, transporte público sin luces, gente que se cruza por donde quiere. Realmente es un reto ser ciclista en esta ciudad. Combino mis trayectos con el metro, el cual me lleva a muchos lados. Lo mejor en la capital mexicana es una bicicleta plegable para combinarla con el metro. Hoy en día existe un aumento de ciclistas, o al menos eso noto, puede deberse a la alza en el precio de las gasolinas. Sea cuál sea la razón, en las grandes avenidas seguramente te encontrarás con una bicicleta blanca, símbolo de la muerte de un ciclista. Bien puede decirse que aventurarse en dos ruedas no motorizadas es un acto de valentía, un acto de fe, un acto de locura. Sea por motivos de ahorro, salud o estilo de vida, falta un gran trecho en la cultura ciclista mexicana.
Y bueno, por eso me gustaría ayudarles.
Saludos.
Kevin Del Pilar